domingo, 1 de marzo de 2009

QUE POCO HE ESCRITO ULTIMAMENTE


Eso no quiere decir que no haya estado dibujando.

Poncho me dijo que debería hacer algún cómic sobre la Primera Guerra Mundial, y mira que siempre me fascinó el tema, pero desde que Prat dejó el listón tan alto con Enemy Ace, a ver quién es el guapo que se atreve. Además, la guerra de las trincheras no tiene nada que ver con mi memoria colectiva, así que no sé si podría hacerlo. Aunque quizás, rascando varias capas algo podría salir, porque había un doctor alemán que creo que fué novio de mi bisabuela y que la abandonó prácticamente al pie del altar en 1915. No sé si debería hablar de esto, es el secreto mejor guardado de mi familia. O lo era.


Así que cerremos la historia inconclusa de la sacada de enjundia en el puerto de Arica y después ya iré subiendo más cosas.

Gorilo se maravilla de haberse roto los nudillos en las costillas flotantes de alguien, así que lo levanta del suelo y lo invita a tomarse algo con él. Parece tópico, pero la mayoría de las peleas a las que asistí en el instituto terminaban así. Una explosión de brutalidad potril seguida por un compadreo Neanderthal y levemente homoerótico. Mis dos peleas terminaron así, (aunque no tuvieron el componente homoerótico)y las dos fueron con el mismo chico. Todavía me acuerdo de él. Un armario de rizos rubios, mejillas siempre rojas y mirada demente que jugaba a ser el chulo del patio hasta que se enrolló con su prima cuatro años mayor que él y se pasó tres años con la sonrisa boba, los ojos de cordero degollado y la laxitud propias del afortunado que ha recibido el regalo de la sexualidad satisfecha a los dieciséis años de edad. Huelga decir que no volvió a pelearse ni conmigo ni con nadie. Tenía cosas mejores que hacer en casa.

Por cierto, las dos peleas conmigo las perdió, una de ellas por un directo que le metí que hizo historia. Después de aquella pelea, nadie me buscó las cosquillas en el barrio. Pero yo no tenía prima mayor que me revolcara y él sí, así que a fin de cuentas el que salió ganando fué el.

En fin....

La ilustración de abajo es la estación de trenes de Arica. Al fondo se puede ver el morro y atrás, a mano izquierda, la aduana.

Los tres dibujos pueden mejorarse.

2 comentarios:

Jorge Siles dijo...

Igual animate y haz algo aunque cortito

Saludos

P. Ramos "Poncho" dijo...

¡Ya tienes motivo para crear algo!

Me gusta esa última viñeta.


Salu2