sábado, 9 de febrero de 2008
NAUSICAA
"Ignoro si eres diosa o mortal criatura. Pero si acaso habitas los valles terrenos. Que tu padre y tu madre juntos sean benditos. Y benditos sean también tus hermanos."
( Homero; La Odisea)
Cada vez que veo a la Nausicaa de Miyazaki, vienen a mi mente estos versos.
Esta obra maestra del anime, (que según parece, tardó mucho tiempo en ver la luz), salió al mercado a mediados de los ochenta, pero nunca pude verla por completo por diversas razones.
Finalmente esta tarde, y gracias a esa maravilla llamada You Tube, hoy mi hijo de tres años y yo pudimos ver la película casi completa ( le falta una escena) en 12 segmentos de nueve minutos cada uno.
No cabe duda de que Hayao Miyazaki ha sido el mayor referente de mi generación en cuanto a ética concierne ( mucho más que Michael Landon, que ya es mucho decir), ya que desde que era un niño que sonreía con Heidi y lloraba con Marco, hasta las lágrimas de emoción y placer que vertí con El Viaje de Chihiro a mis treinta y un años de edad, las historias de Miyazaki siempre me han estrujado el corazón y llegado al tuétano con muy contadas excepciones.
Afortunadamente, tengo muchos otros referentes, y no soy obsesivo en cuanto al manga. En realidad, los Otakus occidentales me parecen seres ridículos y patéticos, y me repugna el ver cómo diversos autores y editores se apuntan al hentai por razones de mercado.
De igual manera, no está de más reconocer que Miyazaki tiene tres o cuatro obsesiones que a veces resultan predecibles: Los aviones y la aviación ( según tengo entendido, el padre de Miyazaki construía aviones), la guerra y la destrucción enfrentadas a la niñez y la inocencia
( Miyazaki vivió la Segunda Guerra Mundial cuando era un niño) , la ecología, las avalanchas de insectos, jabalíes o los chorreantes e hirvientes humores negros y pestilentes que se derriten y colapsan sobre la humanidad y sus mezquindades.
Pero si hay algo que siempre me ha enamorado de Miyazaki, son sus bandas sonoras y sus personajes protagonistas. Y en cuanto a Nausicaa, pues bueno...
Aunque la comparación resulte insólita, Nausicaa es como Betty Blue: Es la chica con la que todos hemos soñado y con la que todos soñaremos siempre. Pero Nausicaa es todavía mejor, porque es perfecta.
Es bella, ágil, valiente, audaz, inteligente, andrógina, dulce, apasionada. Con un corazón tan grande como el universo, y siempre ha logrado enamorarme, no importa cuántas veces me la haya leído.
Esta noche soñaré con ella. Y creo que mi hijo también.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario